lunes, 6 de octubre de 2008

La Confederación Española de Asociaciones de Clubes Náuticos denuncia que la resolución del concurso de Mahón sienta un “gravísimo precedente”

La Confederación Española de Asociaciones de Clubes Náuticos (CEACNA) considera “gravísimo” el precedente sentado por la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) al retirar la concesión de sus amarres al Club Marítimo de Mahón en beneficio de una empresa privada, despreciando los 80 años de historia y de servicio de esta entidad deportiva y social a la ciudad de Mahón.

El caso de Mahón pone de manifiesto, una vez más, la nula sensibilidad de los gestores portuarios del Ministerio de Fomento hacia los clubes náuticos y marítimos, pioneros del sector de la náutica recreativa en nuestro país, así como el desmedido afán recaudatorio que mueve a algunas Autoridades Portuarias, como la de Baleares, a actuar de de forma tan flagrante contra el interés común. Hay que recordar, en este sentido, el apoyo incondicional que tanto el Ayuntamiento de Mahón como el Consell Insular de Menorca, máximas instituciones de la Isla, brindaron al Club Marítimo y que no ha tenido la menor consecuencia en la resolución del concurso.

La CEACNA, que representa a más de 40.000 familias asociadas de las comunidades autónomas de Valencia, Canarias, Murcia y Baleares, decidió en su Junta Directiva ordinaria del pasado 4 de octubre en Lanzarote, en la que estuvieron presentes los presidentes de las asociaciones que la integran, brindar todo su soporte y solidaridad al Club Marítimo de Mahón, y no descartó la posibilidad de personarse bajo la figura jurídica de acción popular en las causas judiciales que puedan derivarse de un concurso público plagado de irregularidades y “negligencias” por parte de la Administración, como no ha tenido más remedio que reconocer el propio presidente de la APB, Francesc Triay.

A juicio de la CEACNA, el proceso que ha terminado cercenando el acceso al mar del Club Marítimo de Mahón debería haber sido declarado “nulo de pleno derecho” desde el momento en que trascendió la existencia de una negociación secreta a espaldas de la Comisión Técnica, hecho que habría provocado una demora de cuatro años, dejando obsoleto el pliego de condiciones.

La “expulsión” del Club Marítimo de Mahón sienta los cimientos, según los clubes náuticos de la CEACNA, de un modelo de gestión portuario basado en la insostenibilidad y la especulación similar al que en los primeros años del ‘boom’ turístico dio lugar al término “balearización”. Esta situación sólo se podrá cambiar a través de una profunda reforma de la Ley de Puertos del Estado vigente en España.

La reunión de la CEACNA de Lanzarote sirvió, asimismo, para debatir las condiciones de la futura creación del distintivo “Q”, de calidad en la gestión portuaria, un proyecto que se encuentra ya en una fase bastante avanzada. Los clubes náuticos se han caracterizado en su mayoría por gestionar las concesiones de forma muy eficiente, siempre sin ánimo de lucro y con el objeto final de promocionar los deportes del mar y la actividad social.

Los miembros de la Confederación también analizaron las candidaturas a la presidencia de la Real Federación Española de Vela, cuyas elecciones se celebrarán en breve.